Patalogías del ojo

LA PRESBICIA

   La presbicia –o vista cansada- , no puede considerarse una anomalía refractiva ni por supuesto una enfermedad ocular. Es simplemente un defecto visual asociado a la edad, empieza alrededor de los 42 años. Esto significa que todos tarde o temprano, seremos présbitas.

Científicamente, es un estado refractivo donde la capacidad de acomodación (el enfoque) del ojo se muestra insuficiente para realizar cualquier tipo de actividad en visión próxima, como leer o escribir, si no se recurre a lentes compensadoras. La explicación orgánica es que a una determinada edad, la cápsula transparente y elástica que cubre el cristalino aumenta su espesor y decrece su factor de elasticidad, imposibilitando en enfoque.  

¿CUANDO COMENZAMOS A SER PRESBITAS?

   En la aparición influyen varios factores: la graduación, la estatura, tipo de actividad laboral, aficiones y deportes en el tiempo dedicado al ocio, etc.

Es también interesante como en personas miopes que utilizan gafas o lentes de contacto bien graduadas, los síntomas aparecen más tarde. En los hipermétropes, no obstante, suele aparecer antes y en los que tienen astigmatismo, dependiendo si astigmatismo miópico ó hipermetrópico.

¿CUALES SON LOS SINTOMAS DE LA PRESBICIA?

               La presbicia es una anomalía visual natural común. Aunque comienza a manifestarse alrededor de los  42 años, casi el 100 por cien de los mayores de 50  son présbitas. Se le denomina también “síndrome de los brazos largos” por los esfuerzos visuales y posturales que debe realizar la persona afectada, obligándole a alargar los brazos para conseguir leer con nitidez un periódico.

         A partir de los 42 años, podemos observar los siguientes síntomas:

  • Imposibilidad de realizar trabajos prolongados en visión próxima.
  • Alejamiento de la lectura.
  • Emborronamiento de las imágenes, fatiga visual.
  • Tendencia a alejar los objetos para observarlos con nitidez.
  • Dificultad en la detección de los detalles pequeños.
  • “Amontonamiento” de las letras en la lectura.
  • Dificultad al enhebrar la aguja.

          Esto no quiere decir que la persona  tenga que ver siempre borroso, ya que también puede sufrir una cierta fatiga visual al realizar trabajos con objetos cercanos, viéndose en la necesidad de alejarlos a una distancia que le resulte más cómoda para continuar su labor.

UNA SOLUCIÓN EXCLUSICVAMENTE ÓPTICA

           Muchas personas creen que al colocarse sus primeras gafas para poder ver de cerca, su presbicia aumentará rápidamente. Esta actitud es errónea; en muchos casos puede llegar a producir problemas de visión, de rendimiento y comportamiento (se abandona la lectura, la costura, las aficiones, etc).

          Es muy importante y aconsejable que, ante los primeros síntomas de “vista cansada”, se consulte al profesional de la visión para que prescriba la mejor graduación y el tipo de lente que sea la más apropiada para la eficaz realización de una actividad determinada.

         La graduación de este tipo de lente compensadora puede variar considerablemente de una persona a otra. 

¿CUAL ES EL MEJOR  TRATAMIENTO?

           El mejor tratamiento para la presbicia es puramente óptico. Existen varios tipos de lentes específicas para cada una de las necesidades de los présbitas; entre las más frecuentes destacan:

  1.- Las lentes monofocales: este tipo de lentes se montan en cualquier gafa convencional -con la ventaja de obtener un amplio campo visual y el inconveniente de sufrir una visión de lejos completamente borrosa-; o en gafas denominadas “media luna”, ideales para aquellas personas que tienen buena visión de lejos, ya que le permiten mirar por encima de ellas. Pero si además se es miope, hipermétrope o astígmata, esta solución es insuficiente ya que el présbita debería de tener dos gafas: unas para lejos y otras para cerca.

2.- Lentes bifocales: esta clase de lentes permiten ver nítidamente objetos que se encuentren cerca y lejos de nosotros, pero perdiendo la visión intermedia.

3.- Lentes progresivas: Estas lentes ofrecen la posibilidad de enfocar a todas las distancias, por lo que elimina las limitaciones propias de la presbicia, además de ser más estéticas, pudiendo ser personalizadas.

4.- Lentes de contacto: En la actualidad la tecnología a resuelto con eficacia el mismo problema por medio de lentes de contacto adecuadas a la presbicia.

                                                          Eloy Llopis Vizcaíno

                                                    Óptico-Optometrista col.10.094